¡Qué rápido pasa el tiempo!, ¿verdad? Las altas temperaturas y la intensidad del mes de junio nos recuerdan que ya han pasado seis meses desde el día en que respiramos hondo y proyectamos el nuevo año. Estoy segura de que entonces trazaste un plan para este año. Con más o menos acierto, decidiste en qué grandes retos enfocarías tus intenciones, definiste algunas metas y esbozaste un plan de acción, un plan estratégico que definía los próximos pasos a dar por tu empresa.
Después empezó el año y más allá de lo planificado, empezaron a acontecer cosas inesperadas. ¿Te suena de algo? Estamos cerrando el primer semestre y toca sentarse un momento, volver la cabeza atrás y observar cómo nos ha ido.
Esta semana terminamos el primer semestre. Es un momento excelente para parar y hacer una valoración sobre cómo te han ido las cosas en esta primera parte del año.
Hubo un momento en que por algún motivo decidiste cuál sería tu estrategia este año. No es importante si lo has conseguido o si te estás desviando mucho. No pasa nada. Lo único que importa es que seas capaz de observar esas desviaciones y analizar por qué se están dando. ¿Qué te está dificultando alcanzar las metas que te propusiste?
Tienes un año por delante, una oportunidad brillante para hacer nuevos planes y orientarte a aquello que de verdad te hace feliz. Aquello que hace que tu negocio crezca.
¿Cómo puedes hacerlo de una manera efectiva?
Este momento es uno de mis favoritos en el año. No hay nada que me haga más feliz que ponerme a tu lado y revisar cómo te ha ido, tomar consciencia del momento en que te encuentras y ayudarte de nuevo a proyectar futuro, recogiendo aprendizajes.
¿Qué ha pasado en tu negocio en estos seis meses? ¿Qué grandes logros destacarías? ¿Se han alcanzado los objetivos de negocio? ¿Qué variaciones se han dado en relación a lo que imaginaste hace seis meses?
¿Cómo va el desarrollo de tu plan estratégico para este año?
Hacer una valoración de las metas alcanzadas en términos de negocio está muy bien, pero no olvides valorar también el desarrollo de la parte relacional, que tan esencial es en las empresas.
¿Cómo han sido las relaciones en tu empresa en estos seis meses? Me refiero a las relaciones con los colaboradores o empleados, con los clientes y también con los proveedores. Al final, el factor humano es lo que mueve no solo a las empresas, sino al mundo en general.
Dentro de este factor humano también debes contemplarte a ti mismo/a. ¿Cómo has estado en este semestre? ¿Sientes que ha habido equilibrio en tu vida personal y profesional? ¿Cómo sientes que ha sido tu gestión del tiempo? Esto es esencial para analizar cómo va el desarrollo de tus capacidades de liderazgo.
Valora cuál ha sido la calidad de vida y el bienestar alcanzado en este semestre, tanto por ti como por tu equipo. Quizás hay margen para la mejora y ¿sabes? no hace falta hacerlo perfecto, pero sí es necesario hacerlo cada vez un poquito mejor.
Y esto es lo que hacemos en el Stop&Go
Uno de los programas que desarrollo para el coaching empresarial es el de Stop&Go, una jornada en la que te invito a detenerte y analizar juntos todos estos factores. Podemos hacerlo de manera individual, tú y yo, de manera conjunta junto a tu equipo o en una sesión compartida junto a otros emprendedores y líderes como tú.
En una sesión de Stop&Go te invitaré a reflexionar sobre todas estas cuestiones, porque es necesario que tú cada vez estés mejor para que tu proyecto crezca, para que la motivación no caiga y todo tu esfuerzo cobre sentido.
¿Cómo estás ahora? Tu empresa, tu cliente, la vida… Te necesitan bien. Solo si estás bien vas a poder proyectar futuro. Y aquí llega mi parte favorita.
Miremos al frente para dibujar aquello que queremos realizar desde ahora hasta la finalización de este año. Definamos de nuevo los grandes retos a alcanzar, los objetivos y las acciones que será necesario acometer y, desde ahí, pensemos.
¿Qué parte de ti es necesario impulsar? Quizás se necesita una parte de ti más impulsora, o aquella que más se relaciona con los demás, quizás necesitamos que disfrutes del camino para que puedas transmitir entusiasmo. Veamos qué parte de ti necesita ser vista, y qué parte de ti necesitas ver tú. Y para esto, también será muy valioso hacer un test DISC.
Quizás te preguntas cómo hacer tu Stop&Go. Suelo programar sesiones grupales y también individuales en las que hacemos este ejercicio. Ambas modalidades funcionan, sólo hay que encontrar aquella que encaja con lo que tú necesitas en este preciso momento para poder identificar los obstáculos o dificultades y proyectar esta segunda parte del año con éxito.
¿Vamos allá?